Hoy vamos a preparar una receta tradicional para una fecha mágica: el Roscón de Reyes. Este delicioso pastel es un clásico en la celebración del Día de Reyes, pero su sabor y textura lo convierten en una excelente opción para desayunos y meriendas durante todo el año.
Prepararemos la masa con Thermomix, aunque cualquier otro robot de cocina puede realizar el mismo proceso.
En el vaso de la Thermomix, añadimos el azúcar y lo glaseamos a velocidad 10 durante 10 segundos. Luego, incorporamos las peladuras de naranja y limón y trituramos a velocidad 10 durante 5 segundos.
Añadimos los huevos, el agua de azahar, la leche, la mantequilla, la nuez moscada, la sal, la levadura prensada y la harina. Programamos 10 minutos en velocidad espiga para amasar. Si la masa se pega demasiado, añadimos un poco más de harina hasta que tenga una textura tierna pero no pegajosa.
Colocamos la masa sobre una superficie enharinada y la amasamos para eliminar el aire. Podemos dividirla en dos partes si queremos hacer dos roscones, uno con nata y otro sin relleno.
Dejamos reposar la masa en un bol enharinado, cubierto con un paño fino, durante 3 horas hasta que duplique o triplique su tamaño. Luego, la amasamos nuevamente y le damos forma de roscón, asegurándonos de que el agujero central sea lo suficientemente grande para que no se cierre al crecer.
Introducimos el haba y la figurita de cerámica en la base del roscón, cerrando bien la masa.
Pintamos el roscón con huevo batido y lo dejamos reposar en el horno apagado durante 1 hora para que vuelva a crecer. Luego, lo sacamos, lo pintamos nuevamente con huevo y lo decoramos con fruta escarchada, almendra laminada y azúcar humedecido con unas gotas de agua.
Precalentamos el horno a 180-200°C y horneamos el roscón durante aproximadamente 20 minutos, hasta que esté dorado.
Si queremos rellenarlo con nata, glaseamos el azúcar en la Thermomix y lo reservamos. Enfriamos el vaso triturando hielo y secamos bien. Colocamos la mariposa, añadimos la nata muy fría y montamos a velocidad 3 o 4 hasta que tenga la consistencia deseada. Incorporamos el azúcar glas y mezclamos suavemente.
Con esta receta fácil y deliciosa, tendrás un Roscón de Reyes casero perfecto para compartir con la familia. Su esponjosidad y aroma a azahar harán que todos disfruten de este dulce tradicional. ¡Esperamos que os salga delicioso y que paséis un día de Reyes inolvidable!