El Mago Borruel alimenta la ilusión con su magia cercana
El Mago Borruel sorprende a grandes y pequeños con su magia cercana. Le encanta pasearse por las calles de la ciudad de los niños y arrancar una sonrisa o una expresión de incredulidad en la cara de los padres que acompañan a sus hijos a convertirse en lo que quieran ser.
Sus espectáculos son fascinantes y cuesta creer que haya un truco detrás de sus movimientos de mano. Su ilusionismo es innovador, ágil y diferente… encaminado a emocionar a su público.
Puedes verle los fines de semana en Micropolix. Su espectáculo va incluido en la entrada a la ciudad. Después de verle creerás en la magia.
¿Cómo supiste que querías ser mago?
Me empezó a picar el gusanillo cuando descubrí que mi hermano mayor tenía el famosísimo “magia borrás” y no lo usaba. Cuando terminé de aprenderme todos los juegos y saturar a mi familia, mi tío me llevó a ver a David Copperfield, y ahí es cuando realmente tomé la decisión de querer ser mago.
¿Es fácil convertirte en uno?
La verdad que es un mundo muy cerrado y hace unos cuantos años no existía la facilidad que hay hoy en día con el tema de internet, escuelas, asociaciones, etc. Es una profesión muy autodidacta y sobre todo al principio es bastante complicado. Pero si realmente te apasiona y notas que sólo (o casi) piensas en magia, es más fácil convertirse en mago.
¿Tuviste el apoyo de tu familia?
Al principio les hacía gracia “ayy, mira el niño lo que hace”,”hazle ese juego a la tia”, pero cuando le dices a tus padres que lo que quieres ser de mayor es mago ya no les hace tanta gracia!
¿Qué satisfacciones te da tu oficio?
Cuando terminas el show y ves que la gente se te acerca con cara de asombro y felicidad y con montón de preguntas
¿Y sinsabores?
De momento no he tenido ninguna mala experiencia.
¿Cuál ha sido el momento más emocionante de tu vida profesional?
Recuerdo mi primera actuación con mucho cariño y sobre todo con mucha emoción. Yo era menor de edad y mi padre era mi acompañante, él estaba mucho más nervioso que yo y me decía “oye, que si no lo ves claro nos vamos y no pasa nada”,jajaja.
¿Por qué elegiste la magia de proximidad?
Creo que es la más gratificante. Estás a pocos centímetros de la gente, puedes notar lo que sienten cuando acaban de ver con sus propios ojos algo mágico.
¿Qué aptitudes hay que tener para ser un buen mago?
La primera es ensayar mucho. Luego ya hay muchas otras facetas que hay que trabajar para lograr lo que queremos transmitir. Pero sobre todo, cuando amas lo que haces, creas esa ilusión que tiene que tener la magia.
¿Crees que el público de un mago es mayoritariamente escéptico o tocado por la ilusión?
Creo que hay un 50-50, aunque ese 50% escéptico cuando ven delante de sus ojos algo “imposible”, lo mejor es ver sus caras y disfrutar de sus frases como “ah,pues no sé”,”y esto cómo es posible?”Entonces es cuando la mayoría se rinden para disfrutar de la ilusión que provoca la magia.
¿Alguna vez no te ha salido un truco en plena actuación? ¿Qué haces o qué harías en esa situación?
De momento fallar en el clímax de un juego no, cruzo los dedos. Lo que sí es verdad es que las personas no saben como termina el juego que les estás haciendo, así que cuando algo no va como debería ir, tomas otro camino y cambias el desenlace. Ellos no se dan cuenta, pero realmente ha sido una variación porque algo no ha salido del todo bien.
¿Qué nos puedes contar del colectivo de magos en España?
De los gremios que he podido conocer a lo largo de mi vida, me quedo sin duda con el círculo de los magos. Es un colectivo donde el compañerismo está por encima de todo.Un claro ejemplo es cuando terminas una actuación y te viene una persona diciendo que es compañero de profesión. Luego, te puedes pasar horas hablando de lo bueno y malo de tu show con una actitud constructiva. Esto pasa en pocos colectivos donde la envidia está por delante y lo único que se quiere es ser mejor que el otro.